Actividad de Reflexión y Análisis Nº4

Uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación 

Antes de enfrentarnos a entrar en el debate sobre cómo sacar el máximo provecho a las Tecnologías de la Información y la Comunicación o T.I.C. y, sobre todo, a través de qué método, nos hemos visto prácticamente obligados en nuestro grupo a debatir previamente si estas nuevas tecnologías tendrían cabida en nuestras futuras clases. Esta disyuntiva ha surgido, principalmente, por las distintas áreas de formación académica de los integrantes del grupo, destacándose el inglés, la filosofía y la química.
Como resulta obvio, no todas las áreas parten del mismo punto a la hora de emplear estas nuevas tecnologías para preparar una clase y elaborar distintas actividades académicas destinadas a los alumnos.

Tras echar un vistazo a las políticas educativas fijadas por el Consejo de Ministros del 25 de Junio del 2010, en relación al uso académico de las T.I.C., como se ha mencionado anteriormente, hemos tenido que entrar a discutir acerca de las ventajas y desventajas que presentan estas nuevas tecnologías. Y, para nuestra sorpresa, nos hemos encontrado prácticamente con tantas ventajas como inconvenientes:

Con respecto a las ventajas de estas tecnologías, nos encontramos algunas que resultan claras y evidentes debido a la era tecnológica en la que vivimos: este uso de las T.I.C. fomentará, en teoría, la motivación y el interés del alumno por el aprendizaje. De esta manera, estaremos favoreciendo el desarrollo del aprendizaje a través de exposiciones visuales, que pueden ser imágenes o vídeos, garantizando así que las explicaciones de los conocimientos que estamos tratando de hacerles ver pueda llegar a la gran mayoría de los alumnos. Partiendo de la base de las fotografías y los vídeos, se pueden elaborar estructuras más complejas tales como conferencias, ejercicios interactivos e incluso una serie de juegos virtuales.
Otra gran ventaja, que a su vez veremos como es un gran inconveniente más adelante, que tiene el uso de estas Tecnologías de la Información y la Comunicación es la facilidad que ofrece para realizar trabajos cooperativos entre alumnos dentro y fuera del aula. Partiendo de la idea de que lo ideal sería un cara a cara entre compañeros, muchas veces resulta complicado hacer quedadas con los demás debido a la enorme diferencia horaria que tiene cada individuo, en materia de tareas y planes extraescolares. A través del uso de estas tecnologías, se puede facilitar esta interacción entre compañeros, haciendo mucho más sencillas las tares grupales que exijan preparación fuera del horario escolar.
Por último, como una de las grandes ventajas hemos señalado la posibilidad de potenciar la interacción entre profesores y alumnos, que alcanzaría así un nivel prácticamente individual debido a que la tecnología que usemos podría darnos pie a abrir portales personales que garanticen una atención personalizada, permitiendo, entre otras cosas, mantener contacto directo académico entre profesores y alumnos, evitando así, por ejemplo, posibles vergüenzas en el aula a la hora de preguntar dudas o a la hora de recibir correcciones del profesor.


Por otro lado, nos hemos visto en la obligación de recalcar ese "lado oscuro" que estas tecnologías traen consigo: una de las desventajas que menos daño hace al sistema educativo sería la obligatoriedad de dar la formación necesaria a los profesores para incorporar estas T.I.C.S a sus respectivas áreas de enseñanza. No es un gran problema, pero seguramente no todos los profesionales del sector vayan a sentirse cómodos recibiendo esta nueva formación, aunque, como bien es sabido, el saber no ocupa lugar.
El gran problema que nos hemos encontrado mientras debatíamos sobre la inclusión en el aula de estas tecnologías es principalmente la aparición de su uso abusivo: como resulta obvio, estos aparatos pueden favorecer la distracción, y, por ende, la pérdida de nuestro objetivo principal de las tareas. Así, en lugar de interiorizar el conocimiento que tratamos de enseñar, pueden quedarse con otras cosas que les haya parecido mucho más interesantes.
Tal y como ha sido mencionado con anterioridad en las ventajas, el hecho de fomentar interacciones virtuales nos aleja de una de las grandes riquezas de la educación, que no es otra cosa que el carácter presencial de las clases, es decir, las interacciones cara a cara entre los mismos alumnos y con los profesores. Podemos fomentar ese mundo virtual abriendo así un abanico de posibilidades enorme, pero no debemos olvidar que los profesores son, o al menos deberían ser, un foco de sabiduría académica y personal. Siempre y cuando fomentemos las interacciones con los alumnos en clase, podremos llegar a fomentar esas aplicaciones virtuales que, sin duda, deberían tener un rol secundario y de refuerzo.
Siguiendo este hilo de ese mundo virtual que nos ofrecen estas nuevas tecnologías, parece obvio pensar en que los tutores legales y los profesores deban hacer uso de unos cortafuegos que garanticen el uso académico de estos dispositivos evitando así el acceso a lugares y direcciones con materiales no didácticos, lo cual es algo que puede resultar contraproducente, pues los alumnos pueden llegar a sentirse controlados, pudiendo sentirse agobiados, agotados e incluso oprimidos en cierto grado, pudiendo verse afectados sus rendimientos académicos.
A raíz de la ventaja que supone la entrega de referencias visuales para garantizar el entendimiento generalizado, surge el enorme inconveniente de estar atentando así contra el pensamiento abstracto. En cierto modo, no podemos hacer uso solamente de imágenes, pues lo único que estaríamos haciendo de este modo sería estar retrasando el proceso cognitivo de los alumnos al no estar fomentando nuevas maneras de entendimiento, como son las palabras dictadas por el profesor.
Y, por último, como desventaja menos importante a nuestros ojos, está el tema de la financión. Cabe destacar ese " a nuestros ojos", puesto que si alguna vez algún miembro del Gobierno llegara a leer esta entrada, probablemente discreparía enérgicamente. Lo único a lo que nos estamos refiriendo aquí es a financiar estas tecnologías de tal manera que se esté fomentando la igualdad de acceso a ella entre alumnos.

En definitiva, y tras haber realizado un intenso e interesante debate acerca de las T.I.C., hemos hablado de la posibilidad de incluir en las aulas pizarras digitales y ordenadores con acceso ciertamente restringido a internet, fomentando así ciertas actividades entre las cuales ha destacado la propuesta de construir una plataforma virtual interactiva, con fines extraescolares, en la que se produzca una interacción alumno-profesor individualizada y con la posibilidad de hacerlo en directo: por ejemplo, según acceda un alumno al portal, el profesor podría recibir una notificación y observar ese ejercicio  o tarea que se vaya a realizar en directo, pudiendo efectuar correcciones o incluso dando un feedback prácticamente instantáneo.













Comentarios

Entradas populares de este blog

Complemento a la Actividad de Reflexión y Análisis Nº19

Actividad de Reflexión y Análisis Nº 20

Actividad de Reflexión y Análisis Nº15